La artesana tras los hilos de seda y el bastidor

Ana Morel, bordadora artesanal Almeriense, que generación tras generación ha sabido conservar las enseñanzas que recibió de su tradicional familia artesana. Así mismo, a lo largo del tiempo ha venido recuperando el arte del bordado artesanal olvidado, consiguiendo que sus bordados queden plasmados en piezas únicas artesanales (vestidos, trajes, abanicos, banderolas y demás piezas singulares de bordado artesano) consiguiendo con ello que forme parte de la vida cotidiana de nuestros tiempos, en que el arte del bordado artesano parecía olvidado. Con su tesón ha conseguido llevar a las pasarelas Andaluzas sus propias creaciones y diseños de costura y bordado artesanal en donde se destaca con especial atención esos bordados artesanales en la técnica del recamado o plumetis. De su tierra natal almeriense ha sabido recuperar la materia prima de sus antepasados (el esparto), llevándolo a sus diseños después de un tratado especial en forma de soga y saco, haciéndolos más exclusivos. Ana Morel nació y se crió entre bordados, bastidores, encajes, bolillos y demás utensilios tradicionales de la artesanía, ya que su familia cuenta con una larga trayectoria histórica como profesionales de las enseñanzas artesanales tradicionales de la provincia de Almería, en donde destacaron como maestras artesanas en el arte del bordado artesanal. Esta mujer artesana está emparentada por línea directa con Doña Luisa Navarro de Vera García de La Rasilla, que fue Directora de La Escuela de Arte y Oficios de Almería en los años 30. De su época se conservan diversos trabajos artesanales de ella de gran calidad artística. Igualmente, su tía-abuela Doña Carmen Ponce de León Ortega, que fue Directora del colegio privado para la formación de la mujer de su época, en donde se impartían además de las asignaturas tradicionales de matemáticas, literatura, geografía, etc. otras asignaturas como música, primores artesanales, etc. siendo la formación que ésta escuela daba muy considerada para la sociedad de la época. Otra de las ascendientes, es su abuela materna Maria Ponce de León Ortega, y su madre Victoria Navarro de Vera Ponce de León, que impartían clases que entre otras asignaturas se encontraban los alumnos de Trabajos Artesanales (bordados, encajes, etc.). Además, trabajaron para una gran clientela que fueron pasando de madres a hijas, en todos los trabajos de “Primores Artesanales”. Desde su más tierna infancia su vida ha estado impregnada de éste arte, formando parte de su educación. Tanto su madre como su abuela, le inculcaron desde su infancia los primeros conocimientos de la aguja y el dedal, incorporándola así a sus primeras labores, en las que ella recuerda, como su madre, sobre una gran mesa redonda, la acomodaba, con esas para ella grandes sábanas o lienzos donde debería empezar sus primeros primores, sus primeras vainicas, laosis, punto llano o arenicas, participando así de la elaboración de los ajuares de sus hermanas mayores, y otras labores tradicionales de aquellos años. Ana Morel además, ha fomentado su formación con estudios musicales, eligiendo como instrumento de cuerda la bandurria, llegando inclusive a debutar ante un público con apenas 9 años. En su colegio formaba parte de la tuna, del coro, teatro o cualquier otra actividad relacionada con el arte. Recibió formación de dibujo artístico que le ha servido para crear esos diseños únicos para luego poder incluirlos en sus bordados artesanales; estudios que cursó en la escuela de Dibujo Artístico de Melilla. Su vida ha estado repartida por distintas ciudades españolas, como A Coruña, Melilla, Córdoba, Madrid..., en donde se ha impregnado de otra cultura y conocimientos artísticos.